Quizás
Por encima de todos los que hoy siguen reinterpretando el Orientalismo europeo a través de sus obras, dos fotógrafas nos han llegado a cautivar por la genialidad y sensibilidad de sus trabajos. Son Halida Boughriet y Lalla Essaydi, dos mujeres con muchos puntos en común: originarias del Magreb, de Argelia y Marruecos respectivamente. Ambas con una formación artística en Occidente. Con unas creaciones extremadamente poéticas que vuelven la mirada a la cultura de origen. Y un juicio al papel que la sociedad ha descargado sobre el ser humano, en sus obras.
Aunque la mujer, y no el hombre, es la protagonista principal de la producción artística de Essaydi, nacida en Marruecos y residente desde su adolescencia en Estados Unidos. Con un fondo completamente crítico con el imaginario orientalista, interroga la imagen de la mujer árabe heredada hoy en día. Más allá de la mera censura de esa imagen, Essaydi utiliza símbolos que actualmente están asociados al Islam y juega con ellos de manera subversiva, regalándoles un doble sentido. En su serie «Les femmes du Maroc«, por ejemplo, fotografía figuras femeninas con el velo, pero que a la vez enseñan partes tan íntimas como el interior de los brazos o la espalda. Toma la caligrafía islámica y cubre los cuerpos imitando la henna, esa decoración corporal tradicional y a la vez tan femenina. Las letras llegan a cubrir toda la superficie de los retratos, que son tratados por la marroquí de manera sorprendentemente detallista. En la serie «Harem» coloca a la mujer en interiores genuinos y las confunde con los azulejos, haciéndolas de alguna manera invisibles, aunque conservando esa sensualidad que reprocha a la visión del Orientalismo. Se inspira a la vez de su historia personal y recrea espacios arquitectónicos asociados mentalmente a su infancia. Pero se trata siempre de interiores, pues «el espacio islámico de la mujer queda en lo privado«, un ámbito privado omnipresente en la base de las creaciones de Lalla Essaydi.
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Las fotografías de Halida Boughriet, sin embargo, se valen más bien de los espacios públicos para poner de manifiesto la pequeñez del hombre en la sociedad actual, usando el urbanismo como pretexto. Lejos de la voluptuosidad de la obra de Essaydi, las personas captadas es sus fotografías están desdibujadas, parecen fantasmas, personajes aplastados por el peso del contexto. Ni siquiera los retratos en primer plano logran sacar del anonimato a estas figuras y es palpable en cada una de ellas el análisis social y una especie de obsesión por un mundo desencantado.
La única serie de la artista que toca el tema del Orientalismo es «Une mémoire dans l´oublie» (Un recuerdo en el olvido), unas fotografías desgarradoras pero también intimistas con un trasfondo profundamenete histórico y sociológico. Boughriet viaja a su país de origen y retrata allí a ancianas que viven sus últimos días en una casa utilizada como asilo o geriátrico. Estas mujeres que se preparan a morir son testigos de la guerra de Argelia, héroes mudos de un capítulo fundamental de la Historia argelina. La artista «roba» los últimos instantes de soledad en los que el decorado y la feminidad de los cuerpos, tumbados sobre el colchón o el sofá, obligan a hacer la relación con los más típicos cuadros orientalistas. Aquí, sin embargo, el contraste entre la delicadeza de los cuerpos tendidos y la tragedia del final de las vidas que representan es brutal.
Para recorrer las maravillosas obras de estas artistas, hagan clic en los nombres:
Josina Nunes
Gostei muitíssimo. A beleza revelada em suas obras, mostram uma profunda integridade da mulher, mesmo nas situações mais dolorosas. Parabéns! Josina
Alejandro de los Santos
Muito obrigado Josina, ficamos muito contentes com a suas palavras. Artistas que questionam a imagem transmitida da mulher árabe desde o século XIX. Sem dúvida, um trabalho muito interessante. Um abraço.