El 1 de diciembre se cumple un año de la muerte del cantante Martiniano Abaga Elé Ndoho, más conocido como Maelé (1959-2017). Considerado uno de los padres de la música urbana de Guinea Ecuatorial, el artista publicó una decena de álbumes y cosechó grandes éxitos en su país natal, en Camerún, Gabón y España.
Autor invitado Pablo Infante-Amate*
Nacido en 1959 en la región continental de Guinea Ecuatorial, en el seno de una familia fang, Maelé se inició en la guitarra y el canto en un coro religioso local en tiempos de la antigua colonia española. Sin embargo, la fama nacional le llegó a finales de los años 1970, poco después de la independencia guineana. Acompañado de su guitarra acústica y de un grupo de bailarinas y coristas, Maelé rompió con el sistema de dance bands de influencia congoleña que imperaba en el país desde los años 1960. Junto con Bessoso y Efa Mba, fue conocido como uno de los cantantes solistas.
Tras ganar varios concursos a nivel nacional y liderar la delegación que representó a Guinea Ecuatorial en el Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes de La Habana en 1978, Maelé saltó a la fama en su país y poco más tarde fue financiado por el estado guineano para grabar su primer álbum en París. El resultado, Evom Nguan (1983), con arreglos de Toto Guillaume y Aladji Touré, grandes maestros del makossa camerunés, es sin duda una de las grabaciones discográficas más relevantes de la historia musical ecuatoguineana.
En una entrevista que tuve ocasión de realizar al artista en 2015, recordaba los tiempos en los que alternaba su trabajo como auxiliar en el banco Guinextebank con su pasión por la música:
“Tuve que firmar una excedencia voluntaria en el banco y fui a grabar a Francia. Y nada más aterrizar en Guinea, después de París, ya me llamaban en Libreville, que había ganado un contrato para ocho espectáculos con otros grandes cantantes gaboneses. Después de grabar con ellos y girar con ellos, ya me tocó otro contrato en Camerún. En Camerún me quedé tres años y grabé tres títulos. Y cuando ya estaba regresando a Guinea el Guinextebank ya se había extinguido”.
Sus discos Chabeli (1987) y Abom (1989) lo coronaron como uno de los mayores artistas de Guinea y lo lanzaron al estrellato, especialmente en Gabón y Camerún, donde residió brevemente y colaboró con artistas de la talla de Sam Fan Thomas. A comienzos de los 1990, su relación de amor-odio con el gobierno ecuatoguineano lo llevó a un breve exilio en España, tras lo cual su carrera fue decayendo progresivamente.
Maelé fue especialmente conocido por desarrollar el género machacando (también conocido en fang como omés, oblum, ozilá o machá), que incorporaba influencias del makossa, del estilo personal del gabonés Pierre Claver Zeng, y de la rítmica tradicional fang. En el machacando, el ritmo bailable en 4/4 es combinado con coros femeninos, puentes interpretados por secciones de viento metal, sintetizadores y guitarras acústicas rasgueadas, que lo distingue de otros géneros populares en Guinea descendientes de la rumba y el soukous centroafricano.
De sus orígenes fang y la influencia de la música tradicional de su etnia, confesaba Maelé que estuvo muy influenciado por Eyi Muan Ndong, gran trovador e intérprete del instrumento de cuerda nvet, utilizado tradicionalmente para acompañar largas epopeyas (nvet-oyeng), cumbre de la literatura oral fang, que condensan la historia y la filosofía de este pueblo:
“Yo me inspiro en nvet-oyeng, porque en 2000 tuve la ocasión de pasar tiempo con Eyi Muan Ndong. Me acuerdo de que fui a verle a su pueblo natal. Y me habló, porque él habla con muchas parábolas. Y me contaba la historia del nvet-oyeng, qué es nvet-oyeng, quiénes son sus creadores y qué mensaje transmite. Empezó a hablar y estuvimos seis horas. ¡Seis horas!”
La muerte de Maelé supuso una gran pérdida para los miembros de la comunidad musical guineana y para todos los amantes de la música de uno de los países más olvidados y denostados de África. Su música, a pesar de que muchos álbumes están descatalogados y son difíciles de encontrar, pervivirá en la memoria de los guineanos.
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* Pablo Infante – Amate es estudiante de doctorado en musicología por la Universidad de Oxford. Actualmente se encuentra en Guinea Ecuatorial realizando el trabajo de campo para su tesis doctoral, donde está investigando las transformaciones en prácticas de producción, circulación y consumo musical generadas tras el boom petrolero y la introducción de tecnologías digitales.